Que Werner Herzog es uno de los mayores poetas del cine actual no es ninguna novedad. Pero en él el término "poesía" pierde cualquier asomo de blandenguería, de fácil muestrario de lugares comunes, cómodos y de una apariencia que puede ser confundida con la belleza, para buscar a personajes extraordinarios que parecen escapados de la más delirante de las ficciones y que, por uno u otro motivo, han rozado los márgenes de la realidad para asomarse más allá.
Asomarse a sus documentales es como sacar el cuerpo más de la cuenta en un mirador de alta montaña: el vértigo puede modificar lo que sientes y, lo que es más importante, intuyes lo que se esconde más allá de un punto donde tú no llegarás, pero sí unos pocos que insinúan ante la cámara de Herzog una mínima parte de lo que vieron allí.
Uno de los ejemplos más sublimes quizá sea El país del silencio y la oscuridad, un documental de 1971 que detiene su mirada en la realidad de los sordociegos, las personas que sufren diversas enfermedades que les privan, a menudo desde el nacimiento, de los sentidos de la vista y del habla, una doble cárcel en la que, en demasiadas ocasiones, sus almas languidecen ante la imposibilidad de comunicarse con los que les rodean. Personas perfectamente inteligentes y conscientes que, sin embargo, permanecen encerradas en un mundo que sólo por simplificar podemos definir con las palabras "silencio" y "oscuridad": "La gente", dicen en un momento del documental, "cree que la sordera es silencio, pero no es cierto. Es un ruido constante que va de un suave zumbido a un zumbido constante..."
La persona extraordinaria, que aunque real contiene en sí todas las esencias de los personajes herzogianos, es Fini Straubinger, una mujer que perdió en su infancia el oído y la vista, y que a consecuencia de los dolores cerebrales que su afección le causaba, tuvo que permanecer acostada durante décadas. Y sin embargo, su presencia no es oscura, sino plenamente luminosa: Fini aparece absolutamente entregada a la labor de recuperar a los que son como ella, de convencer a los políticos para que reconozcan la existencia de estos ciudadanos que difícilmente podrán darse a conocer por ellos mismos, a llevarles consuelo, a rastrearles en psiquiátricos, asilos y casas donde crecen y viven ocultos para evitar los comentarios de la gente.
Fini es un personaje radiante; al contrario que el extraño y un tanto lunático vitalismo de Timothy Treadwell, el protagonista del hasta ahora último documental de Herzog, Grizzly Man, ella sonríe constantemente, se comunica con los que les rodean (afortunadamente, al menos aún puede hablar), se traslada y, al frente de un grupo de personas como ella, apura con avidez cada nueva sensación que pueda llegarle por el tacto o el gusto: les veremos subirse en un avión cuyo fuselaje han palpado con ansia, les veremos reírse cuando les invade, de una manera que el resto no podemos imaginar siquiera, la sensación de estar volando... visitarán un jardín botánico, un zoo y allí, acompañados por guías y ayudantes, descubrirán hambrientas, con sus manos y las explicaciones que les dan marcándoles las palmas de las manos, en un alfabeto codificado para sordociegos, maravillas y detalles que para nosotros son invisibles porque nunca nos detendremos a "mirar" así...
Es superfluo tratar de aprehender con palabras la belleza y la poesía que desprende un documental que rehúye la conmiseración, el morbo o el tranquilizar conciencias: Herzog logra ser aceptado como uno más para hacer un documental, algo que la mayoría ni siquiera sabrán qué es ni podrán apreciar jamás. A mí, su visionado me ha deparado una extraña sensación a medio camino entre el sobrecogimiento y la paz, y un cúmulo de impresiones extrañas, vertiginosas, incluso contradictorias. Vamos, lo normal cuando lo firma quien lo firma.
A continuación, os pongo un enlace de Youtube donde he encontrado un breve fragmento del documental. Está subtitulado en inglés, pero creo que no tendréis problema en seguirlo: en él veréis a Fini con, quizá, el caso más escalofriante del documental, el de un chico de 22 años sordociego de nacimiento, que creció sin atención especializada en una casa al cuidado de su padre y que, para muchos, es ya un caso perdido... Y sin embargo, por alguna extraña razón, lo que a uno le queda cuando termina de ver este fragmento es una sensación de esperanza y de que la música, aunque sean meras vibraciones, es capaz de abrir una grieta, aunque sea momentánea, en el muro que encierra el país del silencio y la oscuridad.
[+] Fragmento de El país del silencio y la oscuridad en Youtube
El país del silencio y la oscuridad
Land des Schweigens und der Dunkelheit
Alemania Occidental, 1971 85 min., color
Guión y dirección: Werner Herzog. Fotografía: Jörg Schmidt-Reitwein. Montaje: Beate Mainka-Jellinghaus
Land des Schweigens und der Dunkelheit
Alemania Occidental, 1971 85 min., color
Guión y dirección: Werner Herzog. Fotografía: Jörg Schmidt-Reitwein. Montaje: Beate Mainka-Jellinghaus
20 comentarios:
Debido a su coqueteo con cierto lirismo cinematográfico, muchos lo han denostado y aislado al ostracismo. Merece mucha más atención. Lo poco que he visto de él, por no ser muy difundido, me ha encantado.
Grandioso post. Enhorabuena.
Un saludo
Voy a ver si me lo puedo bajar del emule en vez de ver solo un fragmento. De Herzog sólo he visto Grizzly que es muy grande pero insuficiente para valorar si es o no un poeta de la imagen.
No es el tipo de cine que suelo ver, pero la verdad, con este tipo de post se aprende mucho, además de aconsejar.
Por cierto, ya he colgado "Sha-Do" en el blog, espero que te guste crack!
Saludos! ;)
Herzog es una auténtica maravilla, Doctor, de eso no hay ninguna duda; y su personalidad es única e intransferible.
La Fnac acaba de editar un pack con varios documentales suyos, Pequeñoibán, y que son una buena muestra de los temas y formas de abordarlos que le definen. Y éste, lo consigas como lo consigas, es totalmente definitorio. Y uno se da cuenta de que hay una coherencia que se mantiene aunque entre él y "Grizzly Man" haya nada menos que 35 años.
Director's, tardaré unos días, porque en un rato me voy de viaje. Pero descuida que lo veré.
Un saludo y buena Semana Santa (o lo que os quede de ella)!
nada... nada... que me has convencido ya. Sin falta estas vacaciones.
Por cierto ¡feliz descanso! (que mal ha sonado esto), que felices días de fiesta (¿mejor?)
Besoss
Jejeje! Ok! Que tengas un buen viaje y una estupenda Semana Santa! Disfruta tú que puedes, que yo este año me he quedado sin vacaciones de Semana Santa, jopeta! ;)
Saludos!
Excelente post. Gracias por descubrirnos una vez más autores que pasan inadvertidos para el gran público pero que a menudo son los que más sensaciones nos transmiten. Tengo una extraña debilidad por las personas que se salen de lo "normal" (qué es normal, eso daría para otro post...) Precisamente hablé el otro día en mi blog de unos documentales que ha producido Julio Medem sobre la esquizofrenia y una artista con síndrome de Down.
Que disfrutes de tu viaje!
Un besito desde Rod@ndo!
Pues no puedo comentar mucho de Herzog ya que no he visto nada, intentaré remediarlo.
Si quiere realmente estremecerse, si no la ha visto ya, es "El Milagro de Ana Sullivan" sobre la vida de Helen Keller que nacio sora, muda y ciega y que gracias al empeño de su profesora Anna Sullivan y su voluntad acabo sus estuidios Cum Laude, aprendio Braille y aprendio a hablar incluso haciendo conferencias.
Saludos!
Herzog, siempre al borde de la genialidad y de la locura, como sus proyectos.
Y un 'post' éste, arriesgadísimo y acertadísimo.
Saludos !
Herzog es muy grande. Adoro a ese cabrón. Este documental en concreto no lo he visto y no sólo me interesaría por Herzog, sino por el tema en sí, así que intentaré agenciármelo.
No he visto este documental, así que haré igual que Marnie, me lo agenciaré.
Saludos
No soy muy objetivo a la hora de hablar de mis debilidades. Herzog lo es, y poco puedo añadir a lo que has escrito sin caer en el elogio gratuito (tanto a él como a ti por tan sincero escrito).
Saludos, Rosenrod.
Me temo que Kinski no opina lo mismo que usted, jejeje.
Por cierto, aprovecho para recomendar su curiosa autobiografia, titulada Yo necesito amor.
Un saludo.
(opina->se sobreentiende como "opinaba". Kinski desgraciadamente falleció hace unos cuantos años)
Pues lo poco que he visto me ha dado agovio,no dudo que sea un gran documental pero me dá miedo pesar en que mis hijos puedan salir así y no me gustaría ver el vídeo completo.H
ace muchos años vi una peli delas de ByN que iba de una niña así y aún no me la he quitado de la cabeza (Esa si que me gustaría encontrarla), no fué hasta hace poco que serví a un sordomudo ciego que iba con una mujer y una especie de máquina de escribir en la que metía el dedo, ella escribía y el entendía por las señales que recibía y biceversa que no me sentí mas tranquila con ese tema, pero, lo dicho, ese video de land of silence dark me ha agoviado para lo que queda de día.
Un saludo
Hay un mundo por descubrir tras esas personas al que nos cuesta mirar y los sordos en realidad no son ellos, sino nosotros que nos negamos a oír sus gritos.
Saludos.
Me gustan los artistas que abordan de esta manera estas temáticas veré si consigo algo de él.
ire a verla:)
Gracias por los buenos deseos, Thalatta; espero que hayan sido estupendos también para ti.
Algo habrás hecho, Director's... ;)
Tengo mucho interés por ese documental, Sayury; te leo...
Una estupenda película, Pol: tienes toda la razón.
¡Vaya, María! Lo siento...
Pues sí, Anónimo... pero me temo que no todo son sonrisas...
Sí, pero me temo que la incomunicación es al final demasiado ominosa, Gregorio... creo que de eso nos habla, en definitiva, este documental.
Creo que te interesará, Vade.
Ya me dices qué te parece si la consigues, Peggy.
Un saludo! Espero que hayáis disfrutado de estos días de asueto...
Desde luego, Cineahora, no se puede negar que el teutón es toda una "rara avis"... Cuando nació, rompieron el molde.
Te fascinará, Marnie: es puro Herzog. Lo tienes en el pack que ha editado hace poco la Fnac (por mencionar una vía confesable)...
Lo mismo le digo, Natalia.
Si es que da para escribir y escribir, Álex... aunque me temo que es difícil acercarse siquiera a la fuerza de muchas de sus imágenes.
Pues no, Rutenman; qué relación amor-odio más fascinante...
Llegué tarde a este post, pero decir que si la peli está en la línea de ORDET, tiene todos mis respetos...
Salud!
Gran blog, actualice más a menudo :)
MARINERO
www.lacoctelera.com/traslaspuertas
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