30 junio 2007

¡QUEREMOS TANTO A WALLANDER!


Ahí le tenéis, él es el culpable. Se llama Henning Mankell y es el creador de uno de los detectives que más seguidores han cosechado en todo el mundo, un policía de Ystad, una pequeña localidad del sur de Suecia, que compagina la investigación de sus casos con los problemas derivados de la soledad que le procura un divorcio, un padre que no le entiende, una hija con la que no logra comunicarse como le gustaría, y que a lo largo de la serie de siete novelas que, cronológicamente, nos lo van presentando, acumula problemas de sobrepeso, un incipient
e alcoholismo, diabetes y, lo peor de todo, la sensación de no entender gran cosa de un país que antes era poco menos que el paraíso y ahora se enfrenta a problemas que sobrepasan las posibilidades de una pequeña comisaría. Su nombre: Kurt Wallander.

Digámoslo claro: Mankell no es, por ejemplo, Raymond Chandler. Literariamente, su estilo es correcto, pero no maravilloso. Y sin embargo, el magnetismo que desprende su personaje es poderoso; quizá porque es fácil reconocerse en sus pequeñas miserias, en los fracasos cotidianos que tanto pueden recordarnos a los nuestros. Quizá porque no es un héroe, y por momentos ni siquiera resulta simpático (lo que resulta más evidente en Antes de que hiele, la primera novela de la nueva serie dedicada a la hija, también policía y en la que Wallander se nos muestra a través de la visión de ella). Quizá, en fin, porque termina siendo un viejo conocido que se reencuentra contigo en cada volumen.



Desde luego, lo que es un hecho cierto que es un éxito; lo fue primero en su país de origen, luego en Alemania y, de ahí, ha ido saltando a otros, entre ellos el nuestro. Tanto es así que Ystad ha creado un paquete turístico para los seguidores del comisario, en el que pueden visitarse los escenarios reales que aparecen en los libros; se multiplican los clubes de fans en internet y el actor que lo encarnó en una serie de adaptaciones televisivas, Rolf Lassgård (al que podéis ver encima de este párrafo) se ha convertido en una celebridad en Suecia y Alemania (aunque ha sido sustituido en la nueva serie, que adapta las novelas de la hija, por Krister Henriksson).

Me he sentido decepcionado al saber que Paul Verhoeven ha cancelado, al parecer definitivamente, su proyecto de adaptar, Hollywood style, Pisando los talones, una de las novelas de la serie. Incluso, se había filtrado que la podría protagonizar Brian Dennehy (¿qué ha sido de él?), un actor que, desde luego, da la apariencia física que uno se imagina en Wallander, aunque quizá sea demasiado viejo. De todas maneras, no parece que vaya a ser así, y bien que lo siento, porque reconozco que las producciones suecas (editadas en nuestro país en DVD y creo que visibles en alguna de las cadenas locales que pululan por ahí) me saben a poco. Tampoco tengo muy claro en qué podía quedar convertido el bueno de Kurt tamizado por el pillo de Paul, pero la curiosidad, desde luego, era máxima.

Habrá que esperar, porque desde luego es un personaje potente, con enormes posibilidades. Mientras tanto, nos quedan los libros, magro consuelo para los que ya nos los hemos devorado. Y si no lo conocéis, os recomiendo coger el primero, Asesinos sin rostro, y echarle un vistazo. Si os gusta, enhorabuena y adelante, tenéis seis títulos más para disfrutar (menos Los perros de Riga, el segundo y con diferencia el más flojo). Y os puedo asegurar que os envidiaré mucho.


P. S. Cuando había terminado de escribir este post, me entero de que Johanna Sällström, la actriz que hacía de la hija de Wallander, Linda, en la serie producida y emitida el año pasado, apareció muerta el pasado 13 de febrero, con tan sólo 32 años de edad, en Malmö. Y, como podéis ver en la cantidad de vídeos que sus fans han colgado en YouTube, sus seguidores eran innumerables. Verdaderamente impresionante.

15 comentarios:

Mar dijo...

¡De acuerdo! ¡me has convencido! voy a empezar a buscar los libros. Estoy casi segura de que me van a encantar.
¡Gracias! ¡besos!

Wilfredo Rosas dijo...

Sep. Coincido con Thalatta... Maldita sea, y yo que quería no comprar más un libro y dedicarme a leer todos los que tengo aún vírgenes.

www.entrecorbatasyescotes.blogspot.com

Faraonika dijo...

No había oído hablar de esta serie de libros.
En cuanto termine con el que estoy ahora mismo iré en busca del primero. Ya te contaré si al final caen los siete (dejaré la segunda entrega para el final) o no.
Un saludo!

Roger Crunch dijo...

Lo de Brian Denehy me ha llegado. ¡qué pedazo de actor y qué buenos papeles de duro que nos ha regalado!
saludos!

Carles Rull dijo...

No conocía para nada a Wallander. Pero sí que es un disgusto esa noticia que Paul Verhoeven no va hacer una película sobre el personaje.
Aunque Brian Dennehy (eso, ¿qué habrá sido de él?) no sé si tendría la edad idonea. Diría que debe ser mucho mayor que el personaje.

BUDOKAN dijo...

Me has convencido a mi también. Parecen ser historias muy atractivas las que vive este personaje que describes. Tomo la recomendación. Saludos!

Anónimo dijo...

Marinero (Alberto Q.)
www.lacoctelera.com/traslaspuertas

A mí me regalaron "El cerebro de Kennedy" y reconozco que la lectura se hizo rápida. Es intrigante y demás pero el final me dejó un poco decepcionado.

Saludos

PD: Este libro que cito no tiene como protagonista ni a Wallander ni a su hija.

Rosenrod dijo...

Ya me dirás qué te parecen, Tha.

Bienvenido, Wilfredo. Bueno, espero que la prueba no te decepcione.

Tú haz la prueba con el primero, Faraonika: es perfecto para tomar el tono de la serie, y ver si te interesa o no.

Si señor, Crunch. Y la verdad es que la noticia me ha hecho pensar en qué estará dedicado ahora; ¿estará haciendo televisión?

Yo creo que sí, Cineahora. Aunque vete tú a saber qué extraños vericuetos seguiría la mente perversa de Mr. Verhoeven...

Lo dicho, Budokan: a ver qué te parece.

La verdad es que las novelas de Mankell que no pertenecen al ciclo Wallander no me llaman mucho la atención, Marinero. Ya digo que su escritura es correcta, no excelsa, pero que ha acertado con la construcción de un personaje con garra como es el inspector Kurt. De hecho, algunos de los libros de la serie también tienen finales un tanto atropellados, pero se lo disculpo porque, entre tanto, has ido siguiendo las andanzas vitales e investigadoras de su protagonista.

Un saludo y gracias a todos. Buena semana!

Maria Del dijo...

Pues habrá que leer algo de ese hombre, encuanto a lo que a adaptaciones televisivas de policias se refiere, ya sabes que para mi, ninguna seríe o pelicula se puede ni podrá comoparar con "El Comisario", ni CSI ni leches, lo de "El Comisario" si son intrigas.
Un saludo

g. neidisch dijo...

Vives en España? Dónde exactamente?
Nadie quiere vivir en una urna. Es lo menos que se puede hacer en un lugar así. Aunque la paciencia debe ser ilimitada.
Gracias por visitar mi blog. Voy a visitar el tuyo con periodicidad...
No conozco la serie... bueno, Oswald, el esposo sueco de Isabel me ha hablado un poco, aunque la tv no es precisamente amiga mía.
Un saludo.

Anónimo dijo...

Estoy un poco desconectado de la novela negra internacional, pero he escuchado opiniones parecidas a la tuya sobre este autor. Lo tengo en mi lista desde hace tiempo (el dinero manda), pero me veré obligado a escalarle posiciones tras leer tu post.
Un saludo, Rosenrod.

An dijo...

tendre que ponerme al dia :)

Rosenrod dijo...

Di que sí, María, ¡el comisario Castilla forever!

Bienvenido, Neidisch. Pues en Madrid; y yo tampoco soy especialmente fan de la serie: eso sí, me encantan los libros.

¡Qué bueno tener una lista de pendientes, Gregorio! Siempre hay esperanza de que, si algo no te gusta, corra el escalafón y algo bueno venga en tu ayuda...

Bueno, tranquilo, que tu hiperactividad no creo que te deje mucho margen, An :)

Gracias a todos!

Anónimo dijo...

Pues no conocía a ese detective. Pensaba que lo próximo de Verhoeven iba a ser The Winter Queen, con la Jovovich.

Estaremos preparados para todo lo que nos traiga este hombre.

Anónimo dijo...

Hola:
Yo no he leido los libros, porque el género no me llama mucho, pero las series suecas (las dos, tanto la de Lassgard como la de Henriksson) me parecen geniales. Yo las veo en alemán a través de satélite, y cuando me entero que ponen una, no me las pierdo. Me voy a animar con los libros.